Dentro de la fase experimental del proyecto se han implementado dos de las tecnologías que mayor interés están despertando en el mundo de la purificación del biogás: los sistemas de membranas y la metanación biológica o power-to-gas. La primera es una tecnología más madura pero con un amplio campo de mejora. La segunda, con un elevado componente de innovación y desarrollo, es capaz de transformar una corriente de entrada de CO2 e H2 en biometano o gas renovable gracias a microorganismos hidrogenotróficos (arqueas).
La inyección a red de gas del gas renovable y su uso como combustible en movilidad son dos de las líneas prioritarias del proyecto. El uso de un combustible cuyo balance de emisiones de CO2 es neutro, supone una importante reducción del impacto medioambiental y permite a la sociedad desplazar a otros combustibles tradicionales como la gasolina y el gasóleo.
En cuanto al piloto de power-to-gas, en 2019 se ha puesto en funcionamiento, utilizando tanto el biogás generado en la depuradora como la corriente residual de CO2 de la planta de membranas, obteniendo en ambos casos corrientes de salida con porcentajes de CH4 de hasta el 95%.
Si quieres ver más resultados de la anterior fase de la Unidad Mixta Gas Renovable descárgate el artículo publicado en RETEMA en 2019 sobre los resultados de la misma.